Desde la Secretaría de Derechos Humanos de FOETRA expresamos nuestro enérgico repudio ante el intento de apropiación y tergiversación del símbolo nacional “Nunca Más” por parte de una fuerza política.
Nuestro gremio sufrió directamente las consecuencias del terrorismo de Estado, con el doloroso saldo de medio centenar de compañeros y compañeras detenidos-desaparecidos y cientos de exiliados, perseguidos y encarcelados. Por ello, enfatizamos que el “Nunca Más” no es una consigna vacía ni un recurso de marketing electoral. Es el resultado de una lucha colectiva por la Memoria, la Verdad y la Justicia, nacida del dolor y el compromiso de miles de familias, de las Madres y Abuelas de Plaza de Mayo, los organismos de DD.HH. y organizaciones como la nuestra.
Denunciamos que pretender resignificar esta frase para atacar a adversarios políticos, mientras la misma fuerza política presentó a genocidas condenados como “pobres abuelitos”, constituye una “banalización inadmisible y una forma de negacionismo encubierto”. Consideramos esta acción una afrenta a quienes dieron su vida por defender los derechos de los trabajadores y por construir un país más justo, libre y soberano.
Finalmente, desde FOETRA, subrayamos que el “Nunca Más” es también una advertencia: “no permitiremos que se impongan agendas ajenas al sentir popular ni que se relativice el horror vivido. La memoria no se negocia. La historia no se distorsiona. Y la búsqueda de Justicia es una bandera irrenunciable para quienes creemos en una Argentina con dignidad, soberanía y derechos”. La frase de Julio César Strassera al cerrar su alegato en el Juicio a las Juntas, “Nunca Más”, se reitera como un símbolo nacional que “no admite reinterpretaciones”.